4° Foro Mundial del Agua: las primeras quejumbres

El día de hoy, en un hotel lujoso de Polanco, se llevó a cabo parte del registro de las personas que participarán en el 4° Foro Mundial del Agua. Previamente se debió hacer un registro por internet y pagar la muy onerosa cantidad solicitada a las cuentas correspondientes. En este día uno tenía que llevar su comprobante del depósito y corroborar los datos del registro electrónico para que le entregaran su gafete.

Al entrar al lugar se vaticinaba el futuro cercano: no había señalamientos adecuados y la gente caminaba cual zombies en laberintos proselitistas. Los fulanos del evento andaban como pollos descabezados: corriendo pa' todos lados pero sin llegar a ningún lado. Ni entre ellos se ponían de acuerdo. Había más orden en la Merced. Lo peor del caso es que de la chamba íbamos varios, entre ellos El Gran Jefe, que ya andaba con cara de muy pocos amigos, y que con cualquier detalle salía de su interior un sonido parecido a cuando un león anda enjaulado y dispuesto a echarse al primer cristiano que se le cruzara por defrente. ¡Qué espanto!

Total, salimos de puritito milagro y sin la certeza de contar con los gafetes correctos. Pero lo más triste del asunto es que el evento ¡ni siquiera ha empezado! Unos holandeses le comentaron a Pecarí que el evento pasado en Japón estuvo muy ordenadito y bien organizado. A este paso el 4° FMA se distinguirá de los demás por la cantidad de guayabazos recibidos. Ojalá que no sea así. Será difícil dejar el nombre de México en alto, pero al menos sería buena opción que no quedara tan abajo.
A ver cómo termina todo esto.